La fundación
El 12 de abril de 1920, un grupo de empresarios paisas, liderado por Jesús María López, fundó la Compañía de Chocolates Cruz Roja, que el 10 de octubre de 1924 se convirtió en Compañía Nacional de Chocolates, después de un arreglo con la Cruz Roja Internacional.
Primer esquema de ventas
Durante su gerencia, Santiago Londoño (1920-24) creó la venta ambulante de chocolate en Medellín para llegarles a los hogares, estableció acuerdos con productores de Manizales y Bogotá para enfrentar la crisis por la caída en los precios externos del café y creó la distribución directa.
Reservas para crisis
En 1922, la compañía empezó a acumular reservas tomadas de las utilidades para cubrir los daños del cacao durante el transporte, depreciar equipos y repartir dividendos. Estos recursos le permitieron sobrellevar los efectos de las guerras de precios y las fluctuaciones del precio internacional del cacao.
Política de precios
En 1927, la junta definió su política de fijación de precios, que sigue teniendo vigencia: "baja utilidad por unidad y altos volúmenes de venta".
El efecto Walliser
En 1927, llegó el técnico suizo Alberto Walliser, quien modernizó la compañía, produjo confites de chocolate, clasificó el cacao para diferenciar las marcas regionales y estandarizarlas, creó un departamento técnico especializado y un laboratorio de pruebas. En 1928, se registró la marca Dux.
Expansión
Entre 1928 y 1931, la Nacional adquirió fábricas en Tolima, Armenia, Pereria, Buga, Sevilla, Anserma, Ibagué y Medellín. En 1927, decidió abrir plantas en Bogotá, Bucaramanga y Medellín. En 1937, compró a sus competidores de Bogotá: Chávez y Equitativa, Santa Fe y Tequendama.
Noel
En 1933, adquirió la Fábrica Nacional de Galletas y Confites, que había sido fundada en 1916, y así nació Noel. Nacional de Chocolates le cedió su fábrica de confites Dux en Bogotá y se especializó en la producción de chocolate de mesa.
Nace Jet
En 1961, registró la marca Jet, chocolatina formulada para el gusto colombiano y creada por iniciativa de Samuel Muñoz, en cuya creación participó Pablo Emilio Echeverri, el primer técnico profesional de origen colombiano que hubo en la empresa.
Nacimiento del Sindicato Antioqueño
Nacimiento del Sindicato Antioqueño
El 4 de abril de 1978, se oficializó la creación del movimiento de defensa del patrimonio antioqueño, que sería coordinado por Fabio Rico Calle, presidente de la Nacional de Chocolates, y que dio origen a lo que se llamó Sindicato Antioqueño.
La nueva era
La nueva era
A partir de enero de 2003, empezó a funcionar la Compañía Inversiones Nacional de Chocolates para separar la actividad productiva de la inversionista. Así, adquirió el control de las 26 empresas de alimentos del grupo y de las demás inversiones. Se buscó una transparencia en el modelo, que contribuyera a su internacionalización.
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